Revision:
En base a los comentarios recibidos por parte de mis compañeros
de clase, he decidido implementar nuevas características que describan a los
personajes que conforman parte de mi historia de conversion. De igual manera,
agregare una descripción mas especifica que permita al lector conocer un poco
mas de mi como actor principal de la historia.
Finalmente, añadiré
una comparación mas especifica en la cual se establezca una mayor relación con
respect al libro de Mormon.
La Ultima Pieza del Rompecabezas
La historia de mi conversion se remonta no solo
al día de mi bautismo sino a mi mucho tiempo atrás, mi niñez. Al igual que
Nephi, yo puedo decir que “nací de buenos padres… si, habiendo
logrado un conocimiento grande de la bondad y los misterios de Dios, escribo
por tanto, la historia de los hechos de mi vida” (1 Nephi 1:1).
Mis padres, un par de amorosos seres quienes aun
sin tener un conocimiento perfecto, se esforzaron por inculcarme virtudes y
valores que me llevarían a encontrar la verdad en la pureza del evangelio. Aun recuerdo
como si fuese ayer el apoyo incondicional que mis padres mostraron cuando tome
la decision de unirme a la iglesia. Agradezco la confianza que mi madre, siendo
una mujer independiente y llena de determinación mostró al inculcarme la
responsabilidad que conlleva elegir. Aun reconozco esa sabiduría de sus
palabras cuando me enseñaba que los actos contraen consecuencias y que cada una
de mis decisiones estaría ligada a resultados que afectarían el curso de mi
vida. De mi madre aprendí a confiar en mi misma y a saber tomar decisiones con sabiduría…
No habían pasado muchos años cuando estando en
la secundaria, un día lluvioso frío y poco alentador, mi padre como todas las
mañanas se dirigió conmigo hacia la escuela, la misma que desde el primer día
me había llenado de terror y abrumaciones. El reloj marcaba las siete de la
mañana, mi cabello estaba húmedo y aun se podían observar algunas delgadas
gotas de agua que corrían a lo largo mi larga cabellera. La obscuridad de esa mañana
era un tanto aterrador y deprimente debido a la desolación que nos aquejaba por
el autoritarismo y falta de empatía que había para con nosotros, lo alumnos. Al
llegar al salon de clases me percate que la profesora de historia quien siempre
era puntual, aun no se encontraba en el recinto y que quizá no llegaría.
Muchos de mis compañeros demostraban al igual
que yo una actitud poco deseable, quizá debido a la oscuridad que asechaba esa
mañana o tal vez por el previo desvelo que llenaba nuestros rostros de ojeras;
o peor aun debido a vacío que hace tiempo había estado ocultando. Sin embargo,
no todo el panorama era gris, mi buena amiga Montse, quien era una joven
bien parecida de tez blanca, cabello obscuro, y manos ásperas; siempre tenia
ese carisma que alegra la vida, esa chispa que permite cambiar una actitud y
repentinamente olvidar lo negativo. En cuanto Montse me miro, apresuradamente
se acerco a mi y me susurro al oído, -Mira quien esta dormido!– con un
tono malévolo me invito a planear un acto que sin duda era irrespetuoso.
Sin duda alguna rechace su invitación Daniel era un chico pálido, tímido y de
pocas palabras quien usualmente era víctima del abuso que otros ejercían sobre
el. Montse cuya imaginación era desaforada, iba mas allá que el ingenio de la
naturaleza, y aun mas allá del milagro y la magia, pensó que era possible
servirse de aquella propia invensión suya de cobijar a Daniel al aventarle una
sudadera en la cara. Mi mente no podia albergar el hecho de intimidar a otra
persona quien aun mostrando un acto de desinterés escolar al postrarse sobre el
pupitre, no representaba razón suficiente para ser atacado. Después de todo uno debe respetar para ser
respetado. Eventualmente, Montse cumplió su cometido, a lo cual Daniel
amablemente y sin enojo comenzó una charla que cambiaría nuestras vidas.
Al indagar mas profundamente en el continuo
desvelo que Daniel mostraba en salon de clases, el nos compartió sin duda uno
de sus mas grandes secretos, antes de acudir a la escuela secular, mi compañero de clase asistía a un seminario religioso. Este hecho me dejo anonadada y me
hizo cambiar la perspectiva que hasta ese momento tenia de Daniel. Ahora sentía
un profundo respeto por ese joven que honoraba sus creencias religiosas y quien
era capaz de hacer sacrificios a favor de sus creencias.
Poco tiempo después comencé a hacer una
introspección de mis propias creencias religiosas, las cuales no requerían prácticamente ningún sacrificio o al menos no asistir a una clase todos los días
a las 5:00 de la mañana.
Mis padres al igual que yo teníamos una
religion, de la cual sabíamos lo suficiente, sin embargo la cultura no contemplaba
el cuestionamiento religioso.
Un buen día, me dedique a meditar acerca de mi propósito en la vida y a cuestionarme el porque estaba aquí en esta tierra
llena de dificultades y malicia; de la misma manera me pregunte que seria de mi después de esta vida. Mi capacidad espiritual hasta ese entonces carecía de agua
viva, de un manantial exquisito que pudiera satisfacer mi sed de verdad. Fue
entonces cuando tome la decision de experimentar, probar cosas nuevas y como
cada adolescente de 14 anos encontrar mi propia identidad, ese algo que
reflejaría mi persona, mi ser, mi espíritu.
Dias después me interese por la motivación que
puede llevar a personas SUD a realizar sacrificios personales en favor de su
cledo. Entonces me pregunte –¿Que conocimiento tienen los SUD que yo ignoro?,
¿Podría yo dejar a un lado mi comodidad personal para asistir a un seminario
matutino?- Miles de preguntas llenaron mi mente de incertidumbre sin embargo,
al igual que el profeta Jose Smith, deseaba saber a que iglesia debía unirme.
Así que me dirigí a Daniel con el propósito de saber mas sobre su iglesia, en
base a su semblante iluminado, el brillo en sus ojos y el resplandecer de la
sonrisa en su rostro, puedo decir que el estaba emocionado por tener la oportunidad
de compartir su conocimiento conmigo. De pronto, Daniel me invito a su iglesia
ese domingo. El día tan esperado llego, debo admitir que me encontraba un poco
nerviosa al enfrentarme a algo desconocido, sin embargo algo me decía que esa
era la ruta correcta, la senda a seguir. Poco antes de comenzar la reunion,
Daniel me presento a los misioneros, un par de jóvenes con vestimenta formal
quienes poseían una mirada singular y me inspiraron confianza de inmediato. Quizá fue su paciencia, su trato agradable o el deseo por ayudar a otros lo cual me
condujo a sentirme bienvenida en aquel edificio blanco.
Al paso de una semana, los misioneros decidieron
reunirse conmigo, el propósito de la reunion fue dar respuesta a muchas de las
preguntas que yo tenia. Durante esa lección, ellos me miraron a los ojos
compartieron su testimonio del evangelio conmigo y fue entonces cuando sentí la
verdad en sus palabras, una increíble conección se volvía cada vez mas fuerte
después de cada verso leído.
Después de esta experiencia vivida, pude
encontrar el significado de las palabras de Alma en un sustancioso pasaje de
las escrituras “Aconteció que Alma empezó a proclamar la palabra de Dios al pueblo, primero en la tierra de Zarahemla, y
desde allí por toda la tierra…-Y ahora os digo, hermanos míos, si habeís
experimentado un cambio en el Corazon, y si habeís sentido el deseo de cantar
la canción del amor que redime, quisiera preguntaros: ¿Podeís sentir esto
ahora?” (Alma 5: 1, 26)
Tal como Alma describió, sentí el profundo deseo de cantar la canción que me llevaría a
la remisión de mis pecados y a experimentar un nuevo comienzo al ser limpia
nuevamente.
Después de esta hermosa experiencia, supe que
los misioneros habían otorgado respuesta a mis muchos cuestionamientos.
Previamente, mi vida había sido como un rompecabezas al cual le hacia falta la
ultima pieza. Sin embargo, esta se desenvolvía poco a poco cada vez que me
arrodillaba humillando al padre en oración. Finalmente, los misioneros habían
sembrado la semilla que daría fruto a la ultima pieza del rompecabezas, pero
tal como mi madre me había enseñado, la responsabilidad de elegir era mía. De
la misma manera, un recuerdo inolvidable se sembró cuando Montse y yo nos
bautizamos en la iglesia verdadera, la iglesia de Jesucristo de los Santos de
los Ultimos Dias.
Wish I could read it. :(
ReplyDeleteViri! me ecantó tu historia. algo que me llamó la atencion es cuando decía "El reloj marcaba las siete de la mañana, mi cabello estaba húmedo y aun se podían observar algunas delgadas gotas de agua que corrían a lo largo mi larga cabellera." me gusta la descripción especifica. capaz si agregues (add) mas descripción asi al resto..sería genial. Me gustó que cada cosa en tu vida fue un parte de la rompe cabeza--y esto es algo que puede aplicar a muchas personas. gracias.
ReplyDeleteMe interesa mucho tu historia en cuanto a tu conversión- en especial porque la compartes en tu idioma natal! Tu tienes una perspectiva única y la compartes con mucha sinceridad- para seguir revisando tu ensayo podrías tratar de hacer que algunas de tus conclusiones sean un poco más indirectas. Por ejemplo, en vez de decir que lo que tu amigo Daniel te dijo iba a cambiar tu vida por completo podrías optar por enseñarnos (con puros detalles) que así fue.
ReplyDelete"La obscuridad de esa mañana era un tanto aterrador y deprimente debido a la desolación que nos aquejaba por el autoritarismo y falta de empatía que había para con nosotros, lo alumnos." Me encanta esta oracion por la descripcion tan especifica. Me ayuda a mi a sentir todo lo que usted y sus companeros de la escuela sintieron.
ReplyDeletea mi me gusta la comparacion de tus padres y los padres de nefi. Aun que no eran miembros de la iglesia, se dio cuenta q eran como los de nefi.
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